

Sin pies
La figura avanza a lo largo de un camino;
su andar no es parejo, su marcha no admite pautas.
Presurosa en el asfalto, tamborilean los tacos;
en la tierra, se olvida de los zapatos
y adhiere a sus plantas el polvo y el barro;
en la húmeda arena del paraíso ribereño se hunde con denuedo
para untarse los dedos y llenarse los poros de semillas orilleras;
y cuando llega al agua y el líquido tornasol de marrón y de cielo
le llega a las rodillas… los pies desaparecen, no son materia.
Y la figura sin pies, se olvida del asfalto y de la rutina;
se echa en la corriente, se empapa de agua dulce,
se acuesta, se tiende sin peso sobre el lienzo
y sólo flota, con los ojos tan lejanos
que además de ser el río, parte hacia el cielo
y vuela, la otra parte de su alma.
La figura avanza a lo largo de un camino;
su andar no es parejo, su marcha no admite pautas.
Presurosa en el asfalto, tamborilean los tacos;
en la tierra, se olvida de los zapatos
y adhiere a sus plantas el polvo y el barro;
en la húmeda arena del paraíso ribereño se hunde con denuedo
para untarse los dedos y llenarse los poros de semillas orilleras;
y cuando llega al agua y el líquido tornasol de marrón y de cielo
le llega a las rodillas… los pies desaparecen, no son materia.
Y la figura sin pies, se olvida del asfalto y de la rutina;
se echa en la corriente, se empapa de agua dulce,
se acuesta, se tiende sin peso sobre el lienzo
y sólo flota, con los ojos tan lejanos
que además de ser el río, parte hacia el cielo
y vuela, la otra parte de su alma.
1 comentario:
Me encantan tus letras...
Me gustó mucho el taller literario, juro que fui sin ganas y luego no queria que se termine.
Muy bueno todo lo que hacés. Seguí adelante!! Fuerza!!!
sabes que la Bella me puede, ya el lugar en sí!
Besos Nancy!!!
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